sábado, 11 de agosto de 2007

CUERPO Y CONCIENCIA

Antonio Damasio, afamado neurólogo autor de "El error de Descartes" y "Sentir lo que sucede", declaró en la entrevista de E. Punset en TVE (link en columna derecha) lo siguiente:
"Y luego las cosas entran en una espiral más complicada en la que aumenta la conciencia y el sentimiento, más y más... pero de algún modo, es necesario el inicio. Si no sintiéramos nuestro organismo, para empezar, si no notáramos sus cambios, ¡no podría haber conciencia! La conciencia está íntimamente vinculada con esta sensación inicial de uno mismo, y para tener una sensación de uno mismo es necesario sentir tu propio organismo y lo que cambia en él".
La madre, en la imagen que ilustra esta entrada, hace cosquillas al niño; este siente el cambio en su cuerpo; siente además que el cambio ocurre en los límites de su cuerpo y que se trata de una sensación gozosa y placentera. Cuando el niño siente que siente, nos devela que la estructura necesaria para tener conciencia existe en él, y devela además que múltiples unidades sensorimotrices se han activado en él y han traído al escenario de su vida, un emocionar. Lo que Damasio nos dice contiene una afirmación radical, cual es, que sin la ocurrencia de fenómenos sensorimotrices no podríamos tener conciencia; no podríamos saber, que que lo que ocurre, ocurre en un self, en un sí mismo..
El origen de la conciencia, está en el cuerpo.

2 comentarios:

Eduardo Troncoso dijo...

Según el psiquiatra alemán Fritz Perls, el organismo posee un sistema de orientación, los sentidos y un sistema de manipulación del medio, la motricidad, con lo cual el ser humano, como cualquier otro ser vivo, se adapta al medio. Es indudable que cuando nos damos cuenta de lo que nos pasa, es decir, darnos cuenta de darnos cuenta, nos sentimos mas capaces y autoapoyados que solo cuando creemos en lo que nuestras ideas nos dicen, sin escuchar nuestro organismo. Es este fundamentalmente quien nos orienta sobre cómo estamos y lo que necesitamos.

jorge veas dijo...

El mismo Pearl, acostumbraba a referirse al punto señalado por Eduardo como "la sabiduría organísmica". Escuchar al cuerpo, a sus fenómenos sensorimotrices, encarnación de aquello que llamamos emoción, es un aspecto escencial en todo abordaje terapéutico.Las personas no generan "sufrimiento abstracto" todo sufrimiento está encarnado; en el cuerpo por supuesto. Por eso, lo que llamamos los sufrimientos del alma, si no tocan el cuerpo,no son sufrimientos encarnados.